Samurái de Ojos Azules –Netflix– Animación japonesa. Mizu, una valiente joven samurái, desafía las normas y oculta su identidad para ejecutar una venganza. Desde hace rato, Netflix ha estado apostando por la animación Japonesa, reconociendo que en el mundo este tipo de propuestas ha ido ganando cada vez más adeptos, series animadas niponas tales como Shingeki no Kyojin (Ataque a los Titanes), Kimetsu no Yaiba (Cazador de Demonios), One Piece, y muchas más, no solo son conocidas en su país de origen, sino que han pegado fuertemente en el a menudo cerrado mercado americano (cerrado para algo que no sea estadounidense vamos).
Así, este año la gran N ha estrenado simultáneamente dos animes de 8 capítulos centrados en el Japón de los Samurái, el primero es “Onimusha”, basado en un videojuego, protagonizado con bombos y platillos nada más y nada menos que por Toshiro Mifune, si leyeron bien, el legendario actor vuelve a la vida en una versión animada de sí mismo. Pero de Onimusha hablaremos en otra ocasión.
Samurái de Ojos Azules: Un despliegue maestro en la animación japonesa
Hoy toca el turno de “Samurái de Ojos Azules”, de Amber Koizumi y Michael Green, producción original de este matrimonio de productores animada a través del estudio francés Blue Spirit.
La historia sigue a Mizu, una joven Samurái que se hace pasar por hombre para poder realizar una compleja venganza en contra de… su padre.
¿A ver? Vamos, por partes, que lo anteriormente escrito no me convence por extremadamente vago y convencional, así que lleguemos a la meta por otro camino.
El periodo Tokugawa y la transformación del país
Japón en el siglo XVII se cierra al mundo, después de ser descubierto por las potencias occidentales, los portugueses inician relaciones comerciales con un país que hacía varios siglos que estaba en guerra, dicha situación termina el año 1600 con la batalla de Sekigahara, imponiendose el señor de la guerra Tokugawa Ieyasu, quien será declarado por el Emperador “Shogun”, el gobernante de facto del Imperio (muchos extranjeros de paso por Japón en la época, definían al Shogun como el Emperador y al Emperador como el Papa, una figura más religiosa que política). Así se da paso al periodo de paz más largo del que disfrutó Japón, y me atrevería a decir que nación alguna de la tierra, 250 años aproximadamente.
La postura de Tokugawa Ieyasu ante los portugueses
En este ambiente, comienza su reinado la familia Tokugawa, Ieyasu su primer Shogun, rápidamente llegó a la conclusión de que permitir a los Portugueses en el Imperio era un problema, su predecesor, Toyotomi Hideyoshi, el gran Taiko que estuvo a un tris de unificar el Japón, pero no lo logró, ya lo había descubierto. Los portugueses llevaban dos cosas a donde fueren, al igual que los Españoles, comercio y religión. Si el lugar en cuestión era interesante y lleno de riquezas, lo conquistaban y lo evangelizaban, por eso es que se llamaban “Conquistadores”. Si el lugar ofrecía algún tipo de resistencia mayor, como en el caso de Japón, que estaba lejos y era además un país lleno de señores de la guerra, en constante guerra, pues la religión ayudaría, convirtiendo a algunos señores al cristianismo, usándolos en contra de los otros y voila, el país quedaría bajo dominio cristiano. A explotarlo pues.
El dilema de las armas de fuego
Japón además tenía otro pequeño inconveniente, los Portugueses vendieron a los señores de la guerra armas de fuego, que los Japoneses alegremente copiaron y fabricaron en masa, así que por el 1.600 Japón era uno de los países con más armas de fuego del mundo, se dice que el total de las armas de fuego que había era superior a la totalidad de las armas de fuego en Europa en el mismo periodo. Así que no era un blanco fácil de conquistar para las potencias occidentales colonialistas. Ieyasu consciente de ello, combatió a los señores cristianos, expulso a los sacerdotes Jesuitas, decidió comerciar con los Holandeses que querían comercio, pero que no les importaba la evangelización. Y en una decisión muy controversial y autosuficiente para la época, cerró las fronteras de Japón a todos los extranjeros bajo pena de muerte, prohibió salir del país a los locales, estratificó las clases sociales de manera rígida, y dio comienzo a la gran paz Tokugawa.
La trágica historia de una mestiza samurái
¿Y todo esto que tiene que ver con Mizu la protagonista?, pues todo, ahora vamos a su historia.
Como dijimos, los extranjeros han sido declarados ilegales, hay 4 en todo el Japón, uno de los cuales es el padre de Mizu quien es una mestiza de ojos azules, travestida a samurái vengador.
Mizu es rechazada por todos, producto de la violación de su madre por un inglés (¿sería compañero de William Adams? El primer inglés llegado a Japón, enemigo declarado de los portugueses y quien se ganó la confianza de Ieyasu siendo nombrado Samurái y consejero, no lo sabemos), es criada por un artesano fabricante de espadas, que al ser ciego ignora que ella, primero es mujer y luego que tiene ojos azules que la hacen a la vista de los niños de la aldea en que vive, un monstruo, así que al lado de su padre adoptivo logra huir de la persecución que su condición de mestiza/mestizo provoca.
El viaje sangriento de Mizu
Con el tiempo cuál onryo o espiritu femenino vengador, Mizu se lanza a los caminos del Japón feudal de los Tokugawa en busca de los hombres responsables de su perdicion, los 4 extranjeros residentes en forma oculta en el Imperio, uno de los cuales es su padre, su venganza se desata.
En su camino, la iracunda protagonista, que se ha convertido en una experta esgrimista autodidacta, irá aparte de eliminando al que se le oponga, dejando un reguero de sangre a su paso, conociendo un variopinto grupo de personajes que la ayudaran o intentaran oponerse a ella. Desde el bondadoso y noble Ringo, un gigante amable sin manos que quiere ser samurái, pasando por el altivo Taigen, un samurái experto que conoció a Mizu en sus tiempos de niñez, hasta la consentida princesa Akemi.
Una inmersión en la violencia, acción y pasión del Japón feudal
¿Estoy hablando demasiado de la historia? No lo creo, pues lo que acabo de escribir es solo el comienzo, el punto de partida de la historia.
Digamoslo asi, “Samurai de Ojos Azules”es una excelente serie, de lo mejor que he visto últimamente relacionado con la cultura Japonesa clásica, su argumento atrapa, está llena de acción y combates, con un gore considerable. Por lo anterior y por las escenas de sexo que tiene, y sin ser puritano, no es una serie para niños, es animación para adultos y punto, están advertidos.
https://www.youtube.com/watch?v=-M6VEbE9XEQ
Análisis del estilo y la determinación
En cuanto al look y diseño de producción en un principio no me agradó tanto porque me recordaron a “Mulan” la hay que decirlo excelente película animada de Disney de fines de los 90. Coincide también que al igual que la prota, nuestra Mizu para lograr sus propósitos debe vestirse y hacerse pasar por hombre. El paralelo llega hasta ahí, Mizu no se corta y va por lo derecho, ella no tiene otra agenda ni otro sentimiento que la venganza en contra de los que la han condenado a ser un/una paria, no hay en su corazón lugar alguno más que para su sangrienta venganza, ¿o no?, le falta a la pobre solo componer un tango. ¿Logrará su venganza? La respuesta, en la serie misma.
Detalles y desafíos de Samurái de Ojos Azules
La historia está llena de conspiraciones, juegos sucios, traiciones, complots gubernamentales, etc. así que su guion es complejo y pese a la constante acción, hay que verla con atención. ¡Salió verso!
Se ha promocionado que está muy apegada a la historia Japonesa en cuanto al look y temas, lo que es cierto, aunque hay algunos detalles menores que no me convencen del todo. Algunos ropajes, algunas formas de empuñar las armas, algunas formas de colocarse las armas en la faja están incorrectas, aunque no siempre. De hecho es extraño que para ser una historia de samuráis, no hay samurái alguno que lleve las dos espadas del samurái, todos llevan invariablemente solo una, la katana. ¿Estaré siendo muy puntilloso? Probablemente, ya que son pequeños detalles que no obstaculizan en nada el disfrute de la serie. La que se vuelve más interesante y adictiva a medida que pasan los capítulos. Uno se encariña y odia a los personajes y es tal el desarrollo y el cuidado de los mismos. En cuanto a sus personalidades, sus motivaciones y su evolución que definitivamente uno se olvida que estamos frente a una animación.
El espejo de la venganza
¿Tiene algunos puntos flojos? A mi modo de ver, sí, pero son poquísimos, el principal es que Mizu es casi invencible. Su fortaleza, habilidad y la capacidad de recuperación de lesiones es casi sobrenatural. Contrastando con su naturaleza genética de mujer, y no estoy siendo machista, solo realista.
Aparte de “Mulan”, hay dos influencias más que sobresalen, una es “Kill Bill” de Quentin Tarantino, obviamente por la temática de la venganza violenta femenina usando una Katana. Otra un poco más oscura y mucho más Japonesa, es la serie de novelas “Nemuri Kyoshiro” de Renzaburo Shibata, cuyas adaptaciones al cine siendo las más populares las protagonizadas por el galán Raizo Ichikawa. Se tradujeron como “El hijo de la misa negra”, o “los ojos somnolientos de la muerte”. Siguen las aventuras de un ronin, un samurái sin amo que es un mestizo. Un hijo de una dama Japonesa violada por un occidental (que comete suicidio por no poder tolerar la vergüenza) a comienzos del Shogunato Tokugawa, concebido en una misa negra, odia a los extranjeros, y se caracteriza por su imperturbabilidad y sus ojos siempre como con sueño. Además de su letal estilo de esgrima.
Samurái de Ojos Azules, una serie que te impactará
Todo este coctel variopinto de influencias funciona de maravilla en “Samurái de ojos azules”. No me quedo corto al decir que estamos ante una de las animaciones del año. Es una serie adulta, violenta, con personajes muy trabajados, que no dejara a ningún adepto a la cultura Japonesa y la animación indiferente. Bien por Netflix, así que vayan corriendo a verla.
Ya sea que contribuyas poco o mucho, tu financiamiento impulsará nuestras labores de reportajes y artículos. Si puedes, por favor, apóyanos de forma mensual con tan solo $(Ar) 1.000 / U$ 5. Tardarás menos de un minuto en hacerlo. Puedes tener la certeza de que cada mes estarás haciendo una contribución significativa en apoyo a esta revista dedicada a promover la cultura marcial. Tu respaldo es muy apreciado.Apóyanos desde Argentina con Mercado Pago
Desde cualquier parte vía Paypal